SEO VS SEM: ¿Cuál debes aplicar en tu negocio?
El SEO y el SEM son dos las dos caras de la misma moneda cuando se trata de aumentar la visibilidad en internet y atraer visitantes a tu sitio web. Pero, ¿Cuál es el enfoque adecuado para tu negocio?
En este artículo, veremos estas estrategias de marketing digital en profundidad analizando sus diferencias y similitudes.
Proveniencia del tráfico
Aunque la proveniencia del tráfico se puede resumir que en ambas estrategias proviene de Google hay una sutil diferencia entre ellas. Y es que el SEO lo consigue a través de la clasificación de manera orgánica, es decir, saldrás el primero si Google considera que eres la mejor opción para lo que está buscando el usuario.
En cambio, con el SEM aparecerás en el apartado de “patrocinado” si estás pagando por salir para la palabra clave que esté buscando el usuario. Es básicamente un Pay To Win.
Velocidad de los resultados
Esta es una de las diferencias más notables respecto a estas dos estrategias, y es que en este apartado son la noche y el día.
Mientras que el SEM es inmediato, ya que al configurar tu campaña y publicarla podrías generar tráfico desde ese preciso momento. El SEO es distinto, y es que entre el tiempo en el que se optimiza la web y lo que tarda Google en considerar que es el mejor resultado pueden pasar incluso meses.
Duración del éxito
Dicen que lo que rápido viene rápido se va, y aquí no vas a encontrar la excepción a la regla. De nuevo ambas estrategias son completamente opuestas en este apartado.
Como dijimos antes con el SEM seremos capaces de generar tráfico desde que se publique la campaña, pero también lo perderemos desde que dejemos de pagar…
Por otro lado, el SEO tarda más en llegar a la cima, pero si se hace un buen trabajo esas primeras posiciones perduran mucho más en el tiempo.
Costes
Y por último, los costes. Este es uno de las diferencias más importantes ya que es el principal motivo de elección entre ambas estrategias.
El SEM tiene un problema, y es que como vimos antes si dejas de pagar pierdes toda la visibilidad. Esto se traduce a que tendrás que desembolsar una cantidad constante mes a mes para poder recibir tráfico, y no solo eso, sino que dicho coste se puede ver aumentado debido a las pujas por la competencia.
En cambio, con el SEO los costes que conlleva son el tiempo y los recursos para optimizar una página web. Por lo que una vez que se haya conseguido estar en las primeras posiciones este costo descendería ya que solo haría falta labores de mantenimiento, dando un mayor retorno de la inversión a largo plazo.
Combinar SEO y SEM puede ser lo que necesitas
Ahora bien, a veces no todo es blanco y o negro, ya que combinar ambas estrategias puede darnos resultados increíbles.
Mientras invertimos en SEO, la web se optimiza y Google la va rastreando, podemos ganar tráfico desde un primer momento gracias al SEM. Además, gracias a ese tráfico pagado, podemos medir ciertos KPI’s que nos serán de utilidad para valorar el proceso de conversión de la web.
De esta manera estamos combinando lo mejor de ambos mundos.
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